domingo, 26 de junio de 2011

el desamor al lado del dolor.

Fui yo la que gritó en medio de la calle,porque necesitaba deshaogarse; fui yo la que se sentó en medio de la plaza para llamar tu atención; fui yo la que me puse a reirme sin parar, para que miraras; fui yo la que no paró de mirar en la dirección, que iba directa a tu corazón; fui yo, la que sin pensarlo, cogí el móvil e intenté llamarte, pero se me olvidó que lo borré; fui yo la que me puse a escuchar esa canción tan bonita que me recordaba a tí, tumbada en la hierba ,tomando el sol, y sí, fui yo la que te quería tanto y ahora se muere por volver a tenerte; fui yo la que te dijo que te olvidaras de todo; fu yo la que te tiró la coca cola a la cara; fui yo la que te escupió; fui yo la que te empezó a odiar sin ningún motivo aparente, pero estaba dentro de mí y le suelen llamar desamor, que está junto al dolor, pero también está cerca de la impotencia, y la valentía de levantarme y decirte, una vez más, que ahora puedes ir olvidando todas esas cosas que hice por tí, buenas y malas, porque ya no somos esos chicos de hace dos años,somos adolescentes, a punto de ver el lado bueno de la vida, y puedo decirte que, te romperán el corazón, como hiciste tú, y te lo dejarán en pedazos sobre esa calle dónde yo te demostré que te quería mas que a nadie, pero,nunca te diste cuenta.

lunes, 20 de junio de 2011

Un sentimiento difícil de explicar.


El amor. Una palabra de dos sílabas y cuatro letras , pero su significado no es tan fácil de explicar.
Es algo inexplicable quizás, algo que sólo algunas personas sienten cuando es correspondido, quiero decir, cuando la persona que amas, te ama igual a tí. Allí es cuando todo es bonito, como si volaras sobre nubes todo el tiempo, cuando eres feliz, y no sabes como remediarlo, estás como atontada, perdida , sin ganas de nada, solo de él. Pero cuando no es correspondido, es cuando te derrumbas, te deprimes, te das cuenta que no quieres seguir aquí, que no quieres seguir viéndole, no quieres saber nada de él, ni de su vida, pero en el fondo de tu corazón, tienes unas ganas tremendas de acercarte a él, y no soltarle jamás en tu vida.
Pero yo pienso, que el amor llega en su momento determinado, cuando el destino piensa que es nuestra hora de volar por las nubes y no preucuparnos de nada, y yo, seguiré esperando esa ráfaga de amor del destino.

Imaginación.

Imagina ,sueña , vuela.
¿Te imaginas vivir en un mundo dónde todo es como tú quieres que sea?;con los colores de la naturaleza, los colores de la felicidad, de la primera y el verano. ¿Te imaginas ser feliz en todo momento? sin lágrimas, discusiones, envidias e insultos, como hay ahora en cada rincón de la ciudad, con cada persona que ves en la calle. Pensarás que estoy loca, que eso nunca ocurrirá, que así ha sido toda la vida,y que tú , formas parte de este mundo cruel, y tienes que vivirlo, sufrirlo. Pero, ¿y si te digo que podemos ir a un lugar lejos de aquí?, imagínate, a un lugar mágico, sin personas malas, sin personas que no te quieren, ¿ a que todo sería más fácil? y ese lugar tan bonito, con tu cosa más preciada alrededor, rodeándote, y tú , con una sonrisa en la boca, y con los ojos húmedos, apunto de llorar de la emoción, porque por fin, en ese momento, puedes sentir miles de cosas, bonitas y felices; porque es allí cuando te das cuenta que con tu imaginación y con una cámara de fotos en la mano, puedes recrear escenas de tu vida, con tus recuerdos más alucinantes a lo largo de tu vida.

Recuerdos, de algo lejano.

Me falta algo, sí, algo muy importante; una persona, sí, será eso, una persona que me dé ese cariño y apoyo que antes tenía. Todavía le tengo dentro, todavía le siento,por supuesto; parece como si fuera ayer, cuando le dejé escapar, cuando sin darme cuenta, perdí a la única persona que necesitaba a mi lado. Hace tres días, sentí un dolor en el pecho; mi interior me avisaba de que hoy era el día, ese día, en que perdí todo, mi sonrisa, mi luz en los ojos , mi felicidad y mi ilusión.
Sí, fue el diecisiete de junio , el peor día que imaginé. No quería recordar,sentir ese dolor por dentro, esa impotencia ,esa rabia consumida durante un año entero; la valentía, era lo que necesitaba, para decir las únicas palabras que me pueden liberar de este caparazón, que no me deja seguir siendo libre, no me deja respirar con tranquilidad, sin echar de menos un momento, un recuerdo de su sonrisa y su personalidad perdida en el fondo de su corazón.